El jamón ibérico es un producto muy nuestro, muy apreciado por su sabor y sus beneficios para la salud. Pero dentro de él hay diferentes categorías que podemos distinguir por los colores de las etiquetas de los jamones ibéricos.
Para que conozcas su significado te explicamos de manera breve y sencilla cuál es su objetivo y qué información nos proporcionan.
El objetivo de las etiquetas de los jamones ibéricos
El motivo por el que se decidió establecer unas etiquetas para los jamones ibéricos es que están considerados como productos gourmet. Productos de gran calidad que hay que evitar que se falsifiquen.
Para impedir las estafas a los consumidores en 2014 se estableció una normativa que controla las etiquetas de los jamones ibéricos.
Etiquetas de los jamones ibéricos, información al consumidor
Con la idea de dar información precisa sobre el tipo de producto ibérico que se compra se crearon las etiquetas de colores. En concreto hay 4 que hacen referencia a dos aspectos principales: raza y tipo de alimentación.
- Negra. Esta etiqueta está destinada a los cerdos 100% de raza ibérica. Animales cuyos dos padres también eran plenamente ibéricos. Además la etiqueta negra quiere decir que han sido alimentados con bellotas. Cerdos criados en libertad en las dehesas y que durante los últimos meses de engorde solo han consumido pastos naturales y bellotas.
- Roja. Indica que son cerdos cruzados, es decir, que tienen un porcentaje de raza ibérica y otro porcentaje de otra raza, normalmente Duroc. En lo que sí son iguales a los jamones de etiqueta negra es en que han sido criados en las dehesas de manera libre y que el último periodo de engorde solo se han alimentado con hierbas aromáticas, pastos y bellotas.
- Verde. Esta etiqueta señala que es un jamón de cebo de campo ibérico. Procedente de cerdos alimentados con piensos y que pueden haber sido completados con pastos naturales. Pueden ser de cerdos de raza 100% ibérica o al 75% o 50% ibérica.
- Blanca. Describe a los jamones de cebo ibérico que proceden de cerdos que se han alimentado a base de piensos de cereales y legumbres en granjas o criadores. Estos cerdos pueden ser 100% ibéricos o ibéricos al 75% o al 50%.